Ayer, otra vez, requisaron 46 celulares en la cárcel

¡El colmo, qué hacer!, “El penal El Milagro sigue siendo una coladera”. Son algunas expresiones no sólo de algunas autoridades sino de los mismos pobladores, empresarios, comerciantes, generalmente, las víctimas de extorsiones, ante los continuos hallazgos de celulares, chips y droga, en el penal El Milagro.

Ayer, otra vez, aunque parezca increíble, a sólo tres días de haberse realizado una requisa con más de 70 agentes policiales, 20 agentes del INPE y del Ministerio Público, hallando 14 celulares, 36 chips y droga, la policía volvió a requisar celulares y chips.

Pero, esta vez, la cantidad fue mayor pues se incautó 46 celulares y 28 chips y nuevamente el lugar donde se encontraron estos aparatos fue en los mismos pabellones donde se requisaron los anteriores hace tres días, esto es, en los pabellones B1 y B2, considerados de máxima seguridad, donde están los “ranqueados”, procesados por extorsiones, robo agravado, homicidios, etc.

Otro dato interesante fue que durante la requisa se encontró uno de estos celulares en manos del recluso Luis Reyes Julián (18) (a) “Negrasho”, por lo que, de acuerdo a la Ley 29867, será procesado por este delito. Esta ley, como se sabe, declara como delito la posesión y uso de celulares en un penal.

Frente a este problema, el jefe del INPE-Norte, Sergio Haro Huapaya, dijo que se ha ampliado la declaratoria de emergencia en el Penal El Milagro y, por lo tanto, “se mantendrán todas las medidas aplicadas hasta ahora”.

Añadió el funcionario que ante la falta de personal y la carencia de tecnología, el único camino que ellos tienen es hacer estas actividades preventivas inopinadas, vale decir, las requisas sorpresivas, para incautar los celulares, armas y droga.

Ahora el problema está en averiguar o investigar en cómo ingresan estos celulares, chips, cargadores, droga. La debilidad está en la falta de control en el personal a las personas que visitan a los internos o es que ellos saben y se hacen los desatendidos o reciben algo o acaso lo meten muy bien camuflados.

La introducción de estos celulares permite que los delincuentes de más alto vuelo siguen haciendo llamadas extorsivas y así los empresarios, comerciantes, gente común y corriente, sean extorsionados por estos delincuentes.

El padre de Carla Mejía, Álvaro Mejía, ha declarado a los cuatro vientos que las llamadas extorsivas que viene recibiendo se ha verificado que proceden del penal El Milagro. Así como esta llamadas existen cientos de llamadas. Satelite