Trujillo: Asesinan a controlador de combis

Trujillo.- Hace dos años, en este mismo mes, en el mismo lugar y casi a la misma hora, Hildebrando Esparza Angulo (66) se libró de milagro de la muerte.

Dos sujetos armados con pistolas de 9 milímetros irrumpieron en la empresa de transportes Nuevo Girasoles, donde trabajaba como controlador de las combis y recaudando la taquilla diaria. Aquella vez, los hampones ingresaron con un solo objetivo: llevarse todo el dinero de la caja. En ese afán, dispararon a matar a Esparza, pero este esquivó increíblemente las balas asesinas.

La noche del último sábado la misma escena se repitió, pero esta vez el desenlace fue totalmente diferente. Hildebrando Esparza acabó muerto de dos balazos en el cuerpo, en el mismo lugar donde en el 2013 vivió para contarla.

El execrable crimen de este trajinado trabajador se registró a las 7 de la noche, en el local de la empresa de transportes Nuevo Girasoles, en el sector Virgen del Socorro del distrito de La Esperanza, donde trabajó 30 años de su vida.
Buscaron por todos lados

A Hildebrando Esparza lo atacaron en la pequeña oficina-bodega de la agencia, donde solía realizar el conteo de la taquilla. Le dispararon justamente cuando hacia esa labor, Dos sujetos cubiertos con capuchas y decididos a todo con armas en mano, ingresaron al local para llevarse el dinero. El controlador ni bien vio a los pistoleros, quiso salir despavorido, pero en el acto los dos balazos lo desplomaron.

Un tiro le impactó en la pierna izquierda y el otro en la cabeza. Su deceso se produjo al instante. En ese momento, ni un cobrador ni chofer se encontraba dentro de la empresa para auxiliar a la víctima. Los asaltantes se dieron tiempo, incluso, para lanzarse a buscar en los cajones y estantes de las oficinas de la empresa. Se imaginaban que había mas dinero, pero al final solo se llevaron 2, 500 soles.

Eran menores
Moradores de la zona, que viven frente a la empresa de transportes, aseguraron que vieron salir a los delincuentes y huir, con dirección al sector Víctor Raúl Haya de la Torre de Huanchaco. Advirtieron que se trataban de menores de edad. "Tenían entre 16 a 17 años y parecían que estaban drogados", dijo uno de los testigos.

A diez minutos de ocurrido el hecho, agentes de la comisaría de Huanchaco realizaron un patrullaje por la zona sin resultado positivo. LaIndustria