Cajamarca: hombre denuncia que estuvo ocho años preso por solo tener un chip a su nombre

La madre del hombre indica que cuando se enteró la noticia no lo pudo creer, sin embargo, nunca se rindió y vendiendo sus caramelos intentó ayudar a su hijo que estaba encarcelado injustamente.

Exigen justicia. Joven estuvo preso en el penal de Huacariz por ocho años esto solo por tener un chip que estuvo a su nombre, sin embargo, esta penuria no solo lo tuvo que vivir Eulalio Máximo Torres Parionam sino también su madre Santosa Felipa Pariona Sierra la cual tenía que ingeniárselas para poder ir a ver a su hijo.

El hijo y la madre, son dos ciudadanos que han vivido toda su vida, sin embargo, luego de esa sentencia tuvieron que cambiar su estilo de vida.

Eulalio (43) denuncia la acción de los jueces del colegio de Cajamarca, esto luego de que en 2015 lo sentenciaran por tener un chip a su nombre que no era suyo, sin embargo, luego de 8 años se hizo justicia esto tras la decisión de la Corte Superior de Justicia de Lima, en el cual se lo liberaba de los cargos imputados.

“Se acabó esta penuria gracias a los jueces de la Corte Superior de Justicia de Lima, lo que yo quiero es hacer esta denuncia presencial para que los jueces de Cajamarca sean realistas, yo estoy lo voy a llevar a la Corte Suprema de Lima y no voy a parar hasta irme a la OCMA”, comenta el hombre.

El sujeto indica que la decisión del juez fue sin pruebas debido a que solo por encontrar un celular con un chip a su nombre fue inculpado de un robo que sucedió en un banco que funcionaba en ese tiempo, sin embargo, las autoridades legales usaron como prueba las cámaras de vigilancia, ni testigos que estuvieron en el hecho.

Amor de madre

Ante la situación que tuvo que afrontar Eulalio, su madre siempre lo acompañó en todos estos ocho años. Al ser residente de Lima, ella tenía que juntar diariamente dinero para poder ir hasta Cajamarca y poder llevarle ropa, comida.

“Yo cuanto he llorad, cuanto he sufrido para mi hijo. Sola he venido, he sufrido lluvia, pidiendo ayuda. Yo no tengo vergüenza, yo he vendido mis caramelitos para llevarle a mi hijo para que coma, sus necesidades. Yo no tenía vergüenza para que coma mi hijo, sin culpa ha pagado mi hijo tantos años de prisión”, comenta llorando la madre de Eulalio.