Boluarte arremete contra marchas juveniles: "resentidos" e "influenciados" por quienes "no trabajan"
La presidenta descalifica protestas de la Generación Z y pide a los jóvenes "no dar un mal ejemplo", ignorando el derecho constitucional a la manifestación pacífica. Acusa a "grupos ensayados" de orquestar las movilizaciones.
En un polémico discurso durante la presentación del general Óscar Arriola como nuevo comandante general de la Policía Nacional del Perú (PNP), la jefa de Estado, Dina Boluarte, optó por deslegitimar las recientes marchas de la Generación Z contra su Gobierno, calificando a los jóvenes como "resentidos" e "influenciados".
La mandataria insinuó que los manifestantes están siendo manipulados por personas que "odian la patria", que "siempre han trabajado del Estado sin hacer absolutamente nada", y que "nunca han ganado una elección democrática". Según Boluarte, estos grupos mueven a los estudiantes y jóvenes en lo que llamó "manotazos de ahogado".
Desconocimiento del Derecho a la Protesta
En su intervención, Boluarte instó a los jóvenes a que "no se dejen manipular" y a que "no salgan a dar un mal ejemplo a sus hijos, hermanos y vecinos". De esta forma, la presidenta pareció desconocer el derecho fundamental a la protesta pacífica, garantizado por el Artículo 2, numeral 12 de la Constitución Política del Perú y la Convención Americana sobre Derechos Humanos.
La presidenta instó a quienes protestan a optar por el diálogo, pidiéndoles que no "salgan a destrozar los bienes privados y públicos", a pesar de que la Constitución ampara la protesta pacífica.
Críticas a los "Ninis" y Ofrecimiento de Capacitación
Acuñando un tono despectivo, Boluarte invitó a los manifestantes a visitar las plataformas ministeriales para capacitarse y postular a un trabajo formal, sugiriendo que, de no hacerlo, se convertirán en lo que llamó "ninis" (ni estudian ni trabajan).
"No hay pretextos para que se quedan en el concepto de resentimiento y convertirse en aquello ninis," sentenció la presidenta, pidiéndoles ignorar a "aquellos que nunca han trabajado, pero vivían cómodamente del Estado."
Finalmente, la jefa de Estado aseguró que su Gobierno "siempre ha trabajado de puertas abiertas" y que "jamás le ha negado el diálogo a absolutamente nadie," a pesar de las críticas persistentes por su falta de interacción con la prensa y las acusaciones de represión durante las protestas que han dejado decenas de víctimas desde su ascenso al poder. Anteriormente, Boluarte ya había rechazado las manifestaciones que pedían su renuncia y el cierre del Congreso, descalificándolas como una mera "plataforma política."

No hay comentarios: